Entrevista con Diego Bestard, Ceo de Urbanitae | Brickfy

Entrevista con Diego Bestard, Ceo de Urbanitae

Entrevista con Diego Bestard, Ceo de Urbanitae
Hace unos meses pudimos conversar con Diego Bestard. Todavía estaba pendiente de conseguir su licencia PFP y nos contaba sus expectativas y experiencias en el sector

"El concepto del crowd siempre me ha parecido el más atractivo y romántico: juntar a mucha gente para aprovechar el músculo financiero de los pequeños y poder hacer grandes cosas."

Diego Bestard. Ceo de Urbanitae

¿Cómo surge Urbantae? ¿Por qué decidiste fundar Urbanitae?

Cuando llegó el momento de elegir qué carrera quería estudiar estuve a punto de estudiar ingeniería informática, pero en ese momento la mayoría de mis compañeros estaban mirando lo mismo y pensé que era mejor estudiar empresariales ya que esa opción siempre me llevaría por el mundo que más me gustara, fuera el tecnológico o el financiero. Y antes de terminar la carrera empecé a trabajar en el sector financiero y al final me he quedado allí. Pero siempre tuve esa inquietud por las nuevas tecnologías y las nuevas plataformas disruptivas que transforman los mercados existentes.

Y después de muchos años trabajando en el sector financiero se me planteó la oportunidad de trabajar en una startup, que fundamos en Alemania con un grupo inversor e incubador enorme llamado Rocket Internet. Y así entré en el mundo del Fintech y de las startups del sector financiero.

En esa startup hacíamos financiación alternativa, pero era direct lending, es decir, no era crowd. Y el concepto del crowd siempre me ha parecido como el más romántico. Esto de juntar a mucha gente para poder aprovechar el músculo financiero de los pequeños y poder hacer grandes cosas, me parecía súper atractivo. Y lo que veía en el mercado que ya existía dentro del sector crowd no me acababa de convencer por varias razones.

Los grandes americanos no acaban de ser crowd del todo, es decir, tienen mucho peso institucional. Y en Europa continental, sobre todo fuera de UK, las plataformas de crowd son muy pequeñitas todavía y los volúmenes de crowd que hacen son pequeños.

Entonces, mirando un poco el mercado y lo que se estaba haciendo, pensé que el crowd ligado con el inmobiliario era un mix súper potente. Principalmente porque el inmobiliario, a nivel de inversión es algo que toca una fibra muy de dentro del ser humano y sobre todo del español. ¡Invertir en inmobiliaria nos encanta! La gente no se cree el invertir en una empresa como Telefónica porque le da miedo el mercado, pero en un piso en una esquina de su barrio todo el mundo tiene ganas de decir “oye tengo un inmueble”.

Entonces el unificar el concepto crowd con lo que es la inversión inmobiliaria a nivel profesional siempre me pareció muy potente. Y entonces hablando con distintas personas y con algún socio, vimos que había alguna posibilidad de entrar en el crowdfunding inmobiliario de una manera muy profesionalizada, que pensábamos que hasta ahora no se estaba haciendo en España.

Y así fue la idea. Decidimos lanzarlo y a principios de 2017 me embarqué en este proyecto que tenemos aquí: Urbanitae.

Estudiaste en la Amercian School y posteriormente estudiaste empresariales en USA. Y antes has mencionado la diferencia entre el mercado español y el mercado internacional, especialmente en el crowdfunding ¿Esta formación americana ha influido en tu visión de negocio y del crowdfunding?

Pues sí, sin duda. Yo he tenido la gran suerte, aunque si me hubieras preguntado en el momento te hubiera dicho que era una desgracia, de estar mudándome constantemente.

Nací en Madrid, me crie aquí y fui al colegio aquí y sabía decir cuatro palabras en inglés, pero con nueve años a mi padre, que trabajaba en una multinacional, le destinaron a Estados Unidos. Y esa fue la primera mudanza que hice. Viví en Estados Unidos tres años y volví a Madrid con doce, que fue cuando estudié en el American School of Madrid. Estuve otros tres años y me volví a Estados Unidos hasta los veinticinco que volví a España. Aunque siempre he estado yendo y viniendo.

Así que a mí lo de las fronteras a nivel empresarial no es algo que tenga nunca en mente. De hecho, la startup anterior que lanzamos tenía la sede en Berlín pero no operaba en Alemania. El primer país de lanzamiento fue España, a los seis meses fuimos a Holanda, a los dos meses fuimos a Australia, Nueva Zelanda, Reino Unido… Es decir, el crear una empresa para un único mercado me parece algo que no tiene ningún sentido. El mundo es muy pequeño y un único mercado no es atractivo. Y por ello, tanto en mis anteriores proyectos, como ahora en Urbanitae, siempre he pensado a nivel global e internacional.

Y cómo da uno el salto de dejar esa startup anterior, SpotCap, de la que además eras cofundador y que funcionaba muy bien, para embarcarte en este nuevo proyecto?

SI te soy sincero me apetecía muchísimo el reto de lanzar algo desde España, con capital español y con gente de aquí. Como te comentaba antes he vivido fuera muchos años y siempre que vuelvo me doy cuenta de que tenemos cierto complejo de que somos españoles. Es que los ingleses son ingles… Es que los americanos son americanos… Es que los alemanes, mucha tela con los alemanes... Y ese complejo que tenemos en España, luego a nivel de habilidades y capacidad no tiene ninguna correlación. La gente que he conocido aquí y los proyectos que salen de aquí con cierta visión, ¡son buenísimos! Así que me apetecía lanzar algo aquí y sin, además, tener que estar todo el día yendo a Berlín como pasaba antes y con capital español y con gente de aquí y hacer algo internacional y grande.

El tema del crowdfunding unido al sector inmobiliario siempre me había parecido súper atractivo y a esto se unía que empezaba a mejorar el ciclo inmobiliario después de unos años muy malos. Montar algo así en 2010 hubiera sido una locura tal y como estaban las cosas. Pero ahora el ciclo acompañaba y a nivel empresarial para mi también era un buen momento: acabábamos de cerrar una ronda muy grande en SpotCap de treinta y seis millones de euros, con lo cual la empresa estaba bien situada y mi marcha no iba a ser dramática. Así que se daban todas las circunstancias, me apetecía mucho y ¡me puse a hacerlo!

¿En que estado está la solicitud de licencia de Urbanitae como PFP en la CNMV?

En este tema, y mirando para atrás todo resulta mucho más fácil, reconozco mi ingenuidad. Cuando empecé a montar esto yo escuchaba que las otras PFPs todavía estaban esperando la concesión de la licencia. Todavía no había ninguna plataforma de crowdfunding inmobiliario autorizada y todas llevaban esperando ocho meses, nueve meses, doce mes… Y yo entré ahí pensándome la más guapa de la fiesta. Y me dije: “nosotros ya tenemos la Ley 5/2015 de las PFPs y como estamos montando algo desde cero, si sigo la ley a rajatabla pues me tendrán que dar la licencia en cuatro o cinco meses…” Y caí en la ingenuidad de montar algo nuevo sin tener ni idea de cómo funcionan las cosas.

Tenemos la solicitud de licencia presentada. No hay ningún problema con la solicitud, pero están tardando lo que tardan. Algunas plataformas han tardado doce meses, otras quince meses. Sí es cierto que nosotros hemos introducido algunos cambios en el expediente, como la entrada de los nuevos socios en la última ronda de capital que hemos cerrado, y eso ha hecho que se ralentice todo un poco. Pero espero que en breve podamos estar operando y abrir la plataforma a todo el mundo.

Ya que estamos con el tema de regulación ¿qué opinas de la regulación actual la ley 5/2015 y del nuevo anteproyecto de ley para crear un sandBox en España?

La opinión que me merece, y creo que es una opinión unánime en el sector, es que es una ley que hay que tener. Que haya una regulación en un sector es bueno y evita que entren malas prácticas que puedan cargarse un sector tan incipiente como es el crowdfunding inmobiliario. Pero es una ley que no se hizo pensando en la actividad que desarrollamos nosotros.

Hay bastantes puntos, que se han hablado largo y tendido en el libro blanco que se hizo en la asociación española de Fintech, que no tienen sentido para el sector inmobiliario. Entiendo que la ley tenga estas limitaciones, pero lo que no entiendo es que se tarde tanto en arreglarlas. Sobre todo, con todo el trabajo que hemos hecho las empresas que estamos en el sector y el trabajo que ha hecho la asociación Fintech para dejar claras cuales son las soluciones que podríamos implementar.

A partir de ahí el tema del sandbox, yo lo he vivido en primera persona con mi anterior startup. No estábamos regulados, pero quisimos estar regulados, así que fuimos al mercado Fintech por excelencia que es el británico, que está regulado por la FCA británica, y conseguimos la licencia con la FCA. Pero lo bueno que tiene es que mientras consigues la licencia te permiten trabajar en un entorno regulado y demostrar que está haciendo las cosas bien hasta conseguir esa licencia. Y en eso consiste un sandbox y a mi me parece que es absolutamente necesario.

En España todavía no existe un sandbox y en mi caso he tenido suerte de poder lanzar este proyecto con suficiente respaldo financiero para poder soportar lo que llevo esperando para poder lanzar al público. Pero estos plazos, para cualquier startup normal que vaya a lanzar algo por primera vez, son inviables. No se puede esperar los tiempos, ni cumplir los objetivos que pide la ley, si estás lanzando algo de cero. Entonces, si lo que queremos es promover la innovación, el autoempleo, las empresas y que el sector Fintech, y en concreto el crowdfunding, sea importante en España tenemos que tener un sandbox. El día que llegue el sandbox, yo espero que ya tendré mi licencia y no me ayudará a mi directamente, pero creo que es muy necesario para los próximos que vengan.

Como miembro de la AEFI y vocal de la vertical de crowdfunding ¿puedes adelantarnos las principales líneas de trabajo que queréis plantear a la CNMV para conseguir mejor la regulación?

Si te soy sincero, cuando la AEFI presentó el Libro Blanco del Fintech yo no estuve involucrado en el tema. En aquel momento estaba en pleno proceso de montar Urbanitae y estaba más pendiente de definir la plataforma y de su desarrollo tecnológico. Con lo que me limité a aportar mi feedback como cualquier otro socio. Y, además, debo decir que en aquel momento yo no conocía demasiado el sector regulatorio en España en esta actividad como para aportar demasiado.

Los temas regulatorios los lleva más Rodrigo de la Cruz, que es el presidente de la asociación, y de momento nos transmite a los socios que la CNMV ve con buenos ojos las propuestas de la asociación, que entienden los puntos que ponemos encima de la mesa y que los cambios son inminentes. Aunque me temo que el concepto de “inminente” para una startup es algo que ocurrió ayer y para una entidad regulatoria, como es la CNMV, el concepto inminente es algo que va para años.

¿Cuál es la propuesta de valor de Urbanitae y qué os hace diferentes?

La principal propuesta de valor en Urbanitae, y que es además la razón por la que pensé que era interesante entrar, es la profesionalización de la inversión inmobiliaria a través del sector del crowdfunding. Yo vengo del sector financiero y he estado en el sector de inversión, he trabajado en banca privada, he trabajado en el sector de seguros, luego he estado en el lending y la financiación a través de SpotCap. Y veía que no me acababa de gustar cómo se estaba ofreciendo este nuevo producto financiero que es el crowdfunding inmobiliario. Y me gustaría profesionalizarlo más y ser más como un fondo de inversión que como una plataforma de venta de artículos o proyectos.

Y, por otro lado, lo que no me acababa de encajar y que se está haciendo no solo en España, sino en la mayoría de países, es que si estamos aprovechando el crowd y juntando a mucha gente para hacer inversiones inmobiliarias y para tener músculo financiero, no tiene mucho sentido hace inversiones pequeñitas. Y por inversiones pequeñas no me refiero sólo a las cantidades invertidas, sino a la tipología de inversiones a las que se ataca. Comprar un pequeño piso por nuestro barrio, reformarlo y venderlo, lo podemos hacer entre cuatro amigos, o incluso de forma individual. La mayoría de la gente conoce o ha estado involucrada en algún momento en este tipo de pequeñas inversiones inmobiliarias. Pero lo que no te llega, porque no está en los portales y agencias inmobiliarios, son los grandes proyectos inmobiliarios. Los grandes edificios y las grandes promociones inmobiliarias se quedan en el círculo profesional de inversión. Tanto en el círculo promotor profesional, como en el círculo inversor. Entonces a mí lo que me interesa, donde veo el valor añadido de verdad, es el juntarnos el suficiente número de pequeños inversores para tener músculo financiero y poder ser un player más dentro de esa mesa cerrada de los que mueven los hilos del sector inmobiliario. Y es donde veo de verdad una gran oportunidad de negocio y creo que es además muy interesante para el pequeño inversor.

Entonces, dentro de vuestra estrategia de enfocaros en grandes proyectos inmobiliarios ¿en qué tipo de productos se va a centrar Urbanitae? Y ¿cómo os afecta, o cómo tenéis pensado trabajar, con la limitación de los 5 millones máximo por proyecto que establece la actual ley en España?

No es necesariamente una oportunidad grande la que requiera más capital. Hay muchísimas inversiones que se quedan muy pequeñas para los grandes fondos de inversión, para los que cualquier cosa por debajo de los 7 o 10 millones de euros suele ser irrelevante y lo dejan de lado. Pero suele ser demasiado grande para los particulares. Y ahí hay un nicho: proyectos que están entre el millón y los cinco millones.

Y para cosas más grandes, muchas de las operaciones inmobiliarias de mayor volumen no las lleva a cabo solo una entidad y se suelen hacer coinversiones.¿Y por qué no va a poder poner Urbanitae 5 millones dentro de un proyecto de 50, 100 o 300 millones para construir por ejemplo una torre de oficinas? Así que nuestro objetivo es ser un player más del mercado y coinvertir en este tipo de grandes oportunidades.

Y, por otro lado, queremos cambiar esos límites también de cantidades que se puedan cerrar mediante crowdfunding. Evidentemente mientras la ley diga que son cinco millones nos vamos a ceñir siempre a esa cifra y siempre vamos a cumplir la regulación que haya. Pero en el Libro Blanco hemos propuesto que esos límites en el sector inmobiliario no tienen ningún sentido. Porque una operación de cinco millones de euros no tiene por qué llevar más riesgo que una operación de cincuenta mil euros, más bien al contrario. Es decir, un local comercial en la calle Serrano de Madrid, aunque te cuesta cinco millones, tiene un riesgo muy limitado y, sin embargo, un local en un barrio de las afueras te cuesta solo cincuenta mil euros y es un riesgo mucho mayor. La cantidad de la inversión no tiene nada que ver con el riesgo y en el crowdfunding inmobiliario esto se ve claramente. Y confiamos en que la ley cambie y nos permita ampliar los límites actuales. E incluso aunque no cambiara, siempre se pueden hacer coinversiones con distintos fondos de inversión y grupos inmobiliarios y esperamos poder ofrecer este tipo de proyectos a nuestros inversores.

¿Cuál es vuestro modelo de negocio de Urbanitae? ¿Qué comisiones cobráis?

Nuestro modelo de negocio es el modelo de negocio clásico del crowdfunding. Nosotros tenemos sólo un fee, sólo cobramos una cosa y no hay más, y es ese fee por el capital que levantemos a través de la plataforma y que es el 5% que paga el promotor por el dinero que capta a través de nuestra plataforma. No le cobramos al inversor, ni le cobramos luego una comisión de gestión ni al promotor ni al inversor. Puede parecer mucho, o puede parecer poco, pero cobramos eso: un 5% del dinero que se levanta en la plataforma. Queremos ser híper profesionales, híper pulcros en los números que damos y que publicamos en la web y queremos ser híper transparentes con lo que cobramos y con cuánto cuesta Urbanitae. Cada uno tendrá su opinión de si es caro o barato, pero lo que no puede ser es que uno no sepa cuánto está pagando. Y en nuestro caso queremos ser absolutamente claros con lo que cobramos en la plataforma, cobramos un 5% de lo que se levanta en la plataforma y ni un euro más.

¿Participa Urbanitae en los proyectos que publica en su web?

La regulación es muy clara en este aspecto. Dice claramente que la plataforma no puede participar de la gestión ni de la promoción y que ésta se debe dedicar exclusivamente a poner en contacto a promotores con inversores y a hacer un poco de árbitro y a analizar los proyectos y ver que sean viables y a aglutinar a los inversores. Sí que puede participar exclusivamente como inversor hasta un máximo del 10%, pero no puede promover los proyectos o participar en su gestión. Y en Urbanitae queremos cumplir lo que marca el regulador a rajatabla, así como el resto de leyes y normas que marque la CNMV.

¿Cómo es el proceso de inversión en Urbanitae? ¿Cómo estructuráis las inversiones y qué cobertura legal tiene el inversor?  

Por la tipología de activos que queremos hacer es muy difícil tener algo muy estandarizado. Es decir, no tiene nada que ver un local comercial en rentabilidad que comprar un suelo para promover. Entonces, como cada tipología será distinta, cada proyecto tendrá su estructura legal y financiera y dependerá de lo que nos propongan los promotores. Nosotros analizaremos los proyectos que nos traen y las estructuras que nos propongan, ya sea equity o deuda, y determinaremos cuál es la mejor manera de invertir.

Por otro lado, contamos con distintos asesores para cada proyecto y realizamos una Due Dilligence a cada proyecto para asegurarnos de que todo está en regla. Por ejemplo, trabajamos bastante con el conocido despacho de abogados Garrigues, para analizar tanto los temas legales como financieros de todos los business plan que nos presentan los promotores.

Además nosotros la manera que tenemos de hacer esta Due Dilligence no es la manera tradicional que tendría cualquier plataforma pequeña. En Urbanitae tenemos un equipo de análisis realmente profesional y que viene del mundo del private equity y que se enfocan exclusivamente en los números. Así que nuestros inversores pueden estar tranquilos ya que cualquier proyecto que subimos a nuestra plataforma ha sido analizando financieramente a conciencia.

De momento habéis estado trabajando en modo piloto con Quabit, ¿Qué rentabilidad media estáis ofreciendo?

Efectivamente la plataforma todavía no está abierta al público y hemos hecho algunas operaciones con Quabit para poder comenzar a testar todos nuestros procesos y sistemas de forma privada.

En cuanto a las cifras, en este momento no puedo darte una cifra ya que, primero, se trata de productos muy diferentes, Y, segundo, porque en la mayoría de las inversiones que hemos realizado todavía no se ha cerrado el ciclo (compra, promoción, venta y devolución del dinero). Aunque son las cifras habituales de la promoción inmobiliaria. No hacemos magia, ni prometemos rentabilidades imposibles. Lo que hacemos es ofrecer a los pequeños inversores oportunidades de inversión que normalmente están fuera del mercado porque tradicionalmente solo podían acceder a ella los inversores profesionales del sector.

¿A qué tipo de público os queréis dirigir y cuál va a ser vuestro ticket mínimo de inversión?

Muy buena pregunta. Y cuando tienes además tanto tiempo para pensarlo como hemos tenido nosotros antes de poder lanzar al público, pues es un tema al que le hemos dado muchísimas vueltas.

Nuestra idea inicial era democratizar al máximo la inversión y rebajar al mínimo la inversión mínima. Pero también creemos que es esencial que el inversor de involucre con nuestro proyecto y que ponga un mínimo de su parte. Y sinceramente creo que alguien que pone 50€ en un proyecto no está invirtiendo, sino que simplemente está probando a ver qué pasa. Cuando pones una cifra tan pequeña probablemente ni se lea bien los números y el análisis del proyecto. Y en Urbanitae queremos que nuestros inversores se lean el dossier del proyecto, que entiendan y analicen bien los riesgos y que nos hagan las preguntas que nos quieran hacer. Y por eso hemos decidido lanzar con un ticket mínimo de 500€.

En Spotcap levantasteis más de 50 millones en diferentes rondas. Y ahora en Urbaniate acabáis de cerrar una ronda de 1 millon con K fund, All iron Ventures  y Veriditas Ventures. Y eso sin haber empezado a operar. ¿Puedes contarnos el secreto de vuestro éxito?  

Pues la verdad es que mi caso no es muy representativo de lo que suele suceder en España. Y siempre he tenido la suerte de encontrar financiación y no porque sea un fuera de serie, ni mucho menos. En mi anterior proyecto fuimos de la mano de Rocket Internet y la primera ronda que hicimos, antes de lanzar al público, fue de 15 millones, con lo que en cuestión de tres meses teníamos un equipo de 60 ingenieros.

Así que supongo que ese track record, así como el de mis socios ha influido mucho. El equipo también es algo realmente importante y el equipo que tenemos es realmente top. Y el proyecto que planteamos también ha levantado mucho interés.

Así que si la conjunción de todos estos factores es lo que nos ha permitido, no solo conseguir financiación, sino poder escoger con quién queríamos hacer este viaje que también es algo realmente importante. Y los tres fondos que nos acompañan aportan mucho más que simplemente capital.

¿Qué planes de futuro tienes Urbanitae y qué nuevos proyectos tenéis en marcha?

Nuestro objetivo es que Urbanitae sea un player importante en el sector inmobiliario español. Y que el crowdfunding inmobiliario deje de ser visto como una cosa anecdótica y que sea realmente el modelo de inversión que creemos que puede y debe llegar a ser.